El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones cerró en la tarde de ayer un acuerdo con los sindicatos para mejorar la plantilla y los servicios de atención de la Seguridad Social y crear, con carácter inmediato, la Agencia Estatal de la Seguridad Social.
De esta manera se desconvocan los paros parciales, en vigor todos los viernes desde el 26 de mayo, además de la huelga anunciada por CCOO y CSIF para el 7 de septiembre, que de haber llegado a producirse habría sido la primera en la historia del organismo público.
El personal de la Seguridad Social se habría visto mermado en la última década, con una pérdida del 22% de su personal, en buena medida por las numerosas jubilaciones de una plantilla de edad avanzada. El número de trabajadores de la Institución pública habría pasado de unos 30.200 a menos de 23.000 en la actualidad.
El acuerdo contempla un aumento de la plantilla y mejoras en las condiciones laborales de los empleados. El ministro José Luis Escrivá se compromete a incorporar a 3.525 nuevos efectivos y mejorar los servicios de atención de la Seguridad Social. Por lo tanto, se incorporarán 2.500 trabajadores a través de la oferta pública de empleo, y otras 1.025 contrataciones para tramitar el Ingreso Mínimo Vital, cuyas plazas pasarán a ser estructurales. Estos empleados vendrían a reforzar las plantillas existentes y habrían sido la clave para desbloquear este fin de semana una negociación que se había enquistado.
De la misma manera, el texto recoge el compromiso del Gobierno para hacer indefinidas las plazas ocupadas por personal interino, y en materia de promoción interna y movilidad el Ejecutivo se compromete a publicar convocatorias anuales para favorecer la promoción y los traslados hacia los puestos vacantes de mayor necesidad para el servicio.
El pacto también incluye implantar dos jornadas de teletrabajo, uno por semana a partir del 1 de julio de 2023, y otro a partir de 2024. Podrán acogerse a esta modalidad los trabajadores de la Seguridad Social, siempre que sus tareas sean susceptibles de ello, con carácter voluntario y garantizando la adecuada prestación de servicio público, especialmente la atención a la ciudadanía.
Otra de las demandas más destacadas por los sindicatos era la creación de la Agencia de la Administración de la Seguridad Social, que unificaría las actuales entidades gestoras (TGSS, INSS, Ingesa, Imserso...) de la Seguridad Social en un mismo órgano. Con ello se pretende lograr una organización más eficiente y una gestión más ágil y eficaz.
El Ministerio se ha comprometido con los sindicatos a articular un plan estratégico de Recursos Humanos para el conjunto del sistema de la Seguridad Social. Para ello se impulsará la creación de la Escuela de Formación de la Seguridad Social y se recuperarán los Comités de Seguridad y Salud provinciales hasta su integración en un Comité único en cada ámbito territorial.
El Gobierno se compromete además a realizar un estudio de los distintos modelos de productividad, teniendo en cuenta las cargas de trabajo soportadas por la plantilla de la Seguridad Social. En todo caso, el nuevo modelo valorará el esfuerzo, la dedicación personal y el cumplimiento de los objetivos propuestos para cada unidad de gestión y/o recaudación”, explican desde CSIF.
COLAPSO EN LA SEGURIDAD SOCIAL
Recordamos que el organismo público acumula muchas quejas por la imposibilidad de conseguir citas y por los retrasos en los trámites (como en la jubilación ordinaria, que se demoraba meses y meses), un colapso que se agudizó tras la pandemia y que ha ido a peor, hasta el punto de provocar mucha tensión y altercados en las sedes.
Esperamos que este acuerdo ayude a descongestionar la sobrecarga de trabajo en la Seguridad Social, agilice las gestiones (reclamaciones, expedientes, documentación...) y acorte los plazos de las resoluciones.
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